domingo, 28 de febrero de 2010

Deseando que estés aquí...

Permanece así... justo cómo mi sonrisa te dibuja en ese espejo. Permanece entre mis brazos, en ese hueco que guardo justo a tu medida.

Permanece entre mi deseo. Sube, baja... pon orden en ésta revolución que tus palabras provocan en mi cuerpo. Calma con tu caricia mi sed. Cura con tus labios el temblor de este suplicio.

Quédate aquí, así, poniendo palabras en mis dedos, imágenes en mi cabeza... ansiedad en mis pensamientos.

Quédate aquí... sólo quédate aquí... Que ésta sonrisa sólo tu la puedes provocar...

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martes, 16 de febrero de 2010

Pájaros revoloteando en la casa...



A veces las ideas, sentimientos e imágenes que tenemos en la cabeza o en el corazón son como pájaros que se meten en casa ajena.

Hay silencios, momentos de tranquilidad que llaman el ruido. Pájaros que aprovechan la oportunidad para meterse en casa. Van dando pasos sigilosos, uno a la vez; tumbos de acá para allá camino al rincón más lejano de la casa.

Caminan por la casa sola sin saber que se acercan pasos detrás de ellos; pasos que no saben que pasa dentro de la casa, ajenos a todo. Ajenos a su luz o su oscuridad.

El pájaro es sorprendido. Él sólo quiere encontrar un lugar cómodo para estar, tal vez algo que lo alimente y le prolongue la vida. Corta de por sí.

Lo ataca el miedo. Saber que ese lugar confortable ahora es un peligro para él. No hay ruta de escape. El corazón empieza a latir y por instinto sus alas empiezan a rozar el aire en batalla desesperada.

Se estrella contra paredes, muebles hasta que el vuelo lo lleva a estrellarse contra los cristales. Parece una salida clara, hay luz detrás de ellos, pero no puede salir.

Cae cansado al suelo, su corazón parece explotar. No puede más, los pasos se acercan cada vez más...

No quiere saber nada más. Tal vez tenga un nido abandonado, alguien que espera por él. De pronto todo se nubla, una cárcel más cerrada y oscura que su miedo lo atrapa.

Esos pasos que también tienen piernas, brazos, manos, boca. Un corazón que late con el mismo miedo lo toma entre sus manos, abre la ventana y lo libera.

Siempre hay un abrazo, una palabra que nos libera. Una palmada que nos avienta al centro del ring para liberar esas sombras que nos impiden escapar por la ventana... liberar los gritos que encierran una casa, un corazón... la memoria.






Dedicado con mucho cariño para el Maestro Gabriel Rojas quién me aventó al centro del ring a pelear contra esta hoja en blanco...

martes, 2 de febrero de 2010

Me dicen PiJeis y acabo de cometer el crimen de cumplir 29 años...

Tengo 29 años recién cumpliditos, nuevitos de paquete.

Cuando estaba morrita veía muy lejana esta fecha... Pensar en cumplir los 20 años era una eternidad para mi. Ahora que llegué a los 29 me doy cuenta que el tiempo se pasa volando, cómo si trajera prisa. Pareciera que quiere pasar desapercibido sabiendo que en su camino no puede concedernos todas las virtudes, sueños o ilusiones. Así es de traicionero ese señor.

Y que ha pasado en este año??... Sería más fácil (y más corto este post) si dijera lo que no ha pasado.
Muchas enseñanzas, caídas, perdidas. La muerte de mi abuela. El extraño retorno de papá a casa. Desilusiones. Desencuentros. Encuentros con personas geniales. Personas que llegan y otras que nunca debieron irse. Personas que ayudaron ( y se les agradece muchísimo) a trascender de un momento a otro. Nuevos amigos, confidentes... cómplices.

Más de dos personas saben de mi SPC: Síndrome Pre Cumpleaños. Es una mamada (es la primera vez que escribo una mala palabra en mi bló, pero la ocasión lo amerita) pero así pasa, lo acepto. Me convierto en una persona insoportable. Si yo no fuera yo, seguramente ya me hubiera mandado a freír espárragos.

Y aquí vamos de nuevo con Twitter...

Gran aventura la del twitteo!! Siempre sacando los extremos en mi. Puedo ir y venir entre la risa y la lagrima y lo mejor de todo, me ha puesto personas geniales en el camino. Entre esas personas, quién dibuja una sonrisa en mi cara con una sola palabra. Quién me llena el corazón cómo nunca antes lo habían hecho por ser único. Por todos los pasos que hemos dado y que nos han traído hasta este momento... también único e irrepetible.

Esta noche llegó para decirme una de las palabras más bellas. Para ponerle el punto final y más bello que el fin de semana necesitaba. Él es el creador de PiJeis y de muchas de las sonrisas que pueden ver y leer en este bló y en Twitter... es capaz de estar sin estar. De darme el calor de su abrazo a la distancia... de hacerme temblar...

Y la lucha sigue...

Algún día seré normal? Espero que no. A pesar de mis tristezas, de mis apuros ilógicos puedo decir que soy feliz. Al final del día hay algo que me hace sonreír: la palabra correcta, la canción que me hace gritar o bailar, el recuerdo de las risas offline/online. Un abrazo de mamá. El momento de imaginar que él está a mi lado. Siempre habrá algo que me haga voltear y darme cuenta de que fue un gran día...

Darme cuenta de que a pesar de que faltan muchas cosas por hacer, estos 29 años han valido la pena...